Ratzinger, un papa para la polémica
El Comunero.
Enero/23
Joseph Aloisius Ratzinger ha sido el 265 Papa de la Iglesia Católica y el séptimo soberano de la Ciudad del Vaticano, desde 2005 hasta su renuncia en 2013.
Se ha distinguido hasta su muerte el pasado 31 de dicviembre de 2022, por ser un Papa con un “aurea” de fanatismo que casaba perfectamente con su pasado nazi como militante de las juventudes Hitlerianas, que no fue capaz de desmentir y que se hizo palpable en su liderazgo contra los derechos civiles de la población LGBT. Un potífice que siempre se apoyó en la extrema derecha vaticana e hizo campaña contra el preservativo en África, contribuyendo a expansión del SIDA. Fue un ideólogo, y desde luego un intelectual de las doctrinas de extrema derecha, a diferencia de su antecesor, Juan Pablo II que siempre evitó hacer apología de su posicionamiento ideológico.
Sin duda fue un auténtico creyente, un inquisidor convencido que dirigió con mano dura la Congregación para la Doctrina de la Fe (Inquisición).
Su implicación en los sucesos ocurridos tras la muerte de Juan pablo I y el escándalo del Banco Ambrosiano de Roberto Calvi y los negocios de Michele Sindona, el enlace entre Roberto Calvi y el obispo Marcinkus, nunca fue aclarada y y nunca quedó libre de sospecha, será también recordado por ser uno de los principales símbolos del anticomunismo, y su lucha contra la expansión del marxismo en Iberoamérica, trabajando codo con codo con su antecesor, Juan pablo II del que fue mano derecha para combatir la teología de la liberación, amén de encubrir los escándalos de pederasia en la Iglesia, donde su hermano era de los implicados y caso por el que debería haber prestado declaración judicial en Enero.
Joseph Ratzinger participó en el Concilio Vaticano II como asesor teológico del cardenal Josef Frings y posteriormente fue nombrado arzobispo de Múnich y Frising, más tarde fue designado cardenal por el papa Pablo VI y en 1981nombrado prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe por el papa Juan Pablo II, quien años más tarde lo nombró decano del Colegio cardenalicio y, como tal, cardenal-obispo de Ostia en 2002.
El 28 de febrero de 2013, renunció al papado en lo que supuso una decisión excepcional en la historia de la Iglesia en un momento en el que la institución se encontraba en su peor momento y de nuevo a punto de ser protagonista de otro escándalo financiero
El papa Ratzinger fue un pontífice mediocre y muy marcado ideológicamente, más preocupado de combatir el comunismo que de llevar a cabo su labor pastoral, un hombre que siempre estuvo envuelto en polémica.
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