Opongosición
Josemi Montalbán.
Octubre/24.
El nombramiento de Teresa Ribera como vicepresidenta europea, era una magnífica oportunidad para que el comparsa Feijóo demostrase un mínimo de talla de estadista, o al menos de eso de lo que tanto presumen él y los suyos; de patriota.
Hoy me sale muy de dentro hablarles de Teresa Ribera, flamante primera vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea, una cartera con mucho poder en Europa, e indiscutible nuevo gol que el pérfido Sánchez le ha colado por toda la escuadra a la troupe franquista PP, liderada por un pollo sin cabeza, una veleta, un pobre pelele en manos de Ayuso, que ha de navegar entre el nazismo de VOX y el falangismo de la perturbada madrileña, que se lo va a merendar en el próximo fracaso.
El gallego no da un paso correcto ni desfilando solo, quiere ser más de VOX que Abascal, más de Falange que Ayuso, y más franquista que Carmen Polo, y así le va al necio, que igual piensa que nunca debió abandonar su Galicia, donde el hombre era feliz surcando las rías con su amigo el narco Marcial Dorado, pero no lo dice y ahí sigue.
El nombramiento de Teresa Ribera como vicepresidenta europea, era una magnífica oportunidad para que el comparsa Feijóo demostrase un mínimo de talla de estadista, o al menos de eso de lo que tanto presumen él y los suyos; de patriota. Su compañera de militancia liberal y presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, una señora también muy de derechas, pero sería, se lo puso de crema pastelera al nombrar a la española como Comisaria de Competencia, para que el líder de la franquicia Corleone en España, se luciese felicitando a su compatriota por el importante puesto para el que ha sido designada, sacara pecho español, muy español y mucho español, y de paso le arrease al maligno Sánchez alguna coz a cuenta de lo la agenda 2030 o cualquier otra cuestión distinta de Venezuela y la no presidencia del golpista González como dictador bolivariano sin bolivarianar.
Pero no, en vez de aprovechar tamaña oportunidad para demostrar un poco de nivel como hombre de Estado, el cometa Feijóo ha demostrado, otra vez, que es un pobre hombre, un mediocre sin más voluntad que la que le ordenan desde la FAES y/o la Puerta del Sol, desde donde le hacen la cama para que, en comparación, Ayuso no parezca estúpida del todo, cuando llegue el momento. Un tipo sin chicha, ni carisma, ni empatía, sin ni siquiera inteligencia suficiente para poder aparentar la mínima dignidad necesaria para estar al frente de un gobierno como el que merece España. En lugar de eso el clown principal de la troupe pepera, se ha coronado, de nuevo, como un traidor, sin mayor interés en España que alcanzar el poder para que los suyos vuelvan al saqueo a lo grande lo antes posible; como un deficiente político instalado en la "opongosición" permanente incapaz ni tan siquiera del decoro deportivo de reconocer una buena jugada del rival, no vaya a ser que el Capo di tutti capi, Aznar, lo tome como signo de debilidad, y lo defenestre como defenestró a su predecesor Casado, cuando éste señaló a la niña bonita del Don, por las corruptelas y la poca vergüenza del hermano Tomás, que en sus mordidas está.
Yo no lo sé porque no estoy allí, pero me imagino que Ursula von der Leyen, debe estar hasta el mismo escaño de que esta truope de extrema derecha pepera le llegue un día sí y otro también con chorradas contra el legítimo gobierno de España, y, además, no sean capaces ni de mostrar un mínimo de deportividad, y debe de estar pensando la criatura que, amén de traidores, los nobles de la organización criminal PP son unos tipos muy mal educados para haberlo sido en colegios caros.
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