El impacto cultural Combino en América
Julia Montalbán.
Octubre/24.
El problema diplomático suscitado por la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, al no invitar al rey Felipe VI a su toma de posesión, ha traído de nuevo a la palestra la "Leyenda Negra" de las atrocidades cometidas por España en aquellas tierras (que algunas hubo, sí, pero ambos bandos), sin embargo, voy a tratar de reseñar aquí algunos de los muy interesantes aspectos culturales que la presencia de los españoles en América conllevó y el impacto cultural que el desembarco de Colón supuso para ambas partes.
Resulta innegable que el impacto Colombino en América es de tal importancia que ha marcado un hito sin precedentes en la historia de la humanidad, equiparable a la llegada del hombre a la Luna, que tuvo consecuencias tanto económicas, como sociales y, por supuesto culturales, que resultaron determinantes tanto para las sociedades nativas, como para Europa donde los españoles las derramaron.
Como en toda conquista hubo episodios dramáticos, enfrentamientos sanguinarios, actos de crueldad y desde luego saqueo de riquezas; pero también y no como en toda conquista, hubo mestizaje, intercambio cultural, colaboración y hermanamiento. Lo primero quedó diluido en la historia, lo segundo permanece.
De entre las consecuencias imperecederas podemos destacar la importación de especies animales y vegetales, la llegada de la patata a Europa o la introducción del caballo en América, por ejemplo. Hubo intercambio de conocimientos astronómicos, y ambas sociedades se beneficiaron de los conocimientos agrícolas que unos y otros aportaron para lograr un mayor aprovechamiento de los recursos naturales.
Es lógico que la llegada de nuevas ideas e incluso de la utilización de tecnologías distintas y el intercambio de todo ello, derivase en un cambio social más acentuado sin duda en las comunidades indígenas que en la española. El impacto Colombino en las sociedades nativas fue profundo conllevando cambios políticos, con la implantación de sistemas reguladores, en teoría, fuera del control de los jerarcas, culturales con la introducción de una nueva lengua y diferentes estilos artísticos y, desde luego, religiosos con la forzosa conversión al catolicismo de las sociedades americanas, hasta la llegada de los españoles, libres de la sumisión al Dios cristiano.
Es absurdo pensar que todos esos cambios no conllevaron abusos e injusticias por parte de los más fuertes, en este caso los españoles, sin duda los hubo, pero también hubo una expansión de la cultura, de la sanidad, de la lógica, se construyeron numerosas universidades, hospitales, escuelas...en una interacción y complicada mezcolanza entre las creencias de los pueblos indígenas.
Ese dificilísimo "encaje" religioso, legislativo y cultural, no se produjo de manera inmediata ni de buen grado, puesto que los nativos americanos se resistieron a ver alteradas, suprimidas o adaptadas sus costumbres y tradiciones, como forma de conservas, a pesar de los invasores las señas de identidad de su pueblo, lo que, con el paso del tiempo, dio lugar al alumbramiento de nuevas identidades que ya llevaban en su ser el ADN de ambos mundos, que, a su vez, dio a luz a un nuevo concepto artístico y literario que se ha mantenido hasta nuestros días con ligeras variaciones o influencias, básicamente anglófonas por la importante presencia que los Estado Unidos mantiene en los todos los aspectos del desarrollo de las actuales sociedades de América, y nadie le pide al gigante norteamericano que pida perdón por las innumerables tropelías que perpetran no solo en el nuevo continente, sino en el resto del mundo.
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