El hastío del estío


Fernando Alés.

Julio/24.

 

 

Por fin se ha pactado la renovación del CGPJ. Después de cinco años. Aplaudir no voy a aplaudir, porque ya está bien, que se renueve. Aunque si entramos en matices, no parece que se haya conseguido sin alguna concesión. Siempre dije que la izquierda nunca fue perfecta, pero de ahí a ofrecer la yugular...se ve una falta total de unidad, de estrategia política y de la consecución del bienestar común.

 

 

En esta ocasión, será quizás por los próximos calores estivales, que no encuentro un asunto concreto por dónde empezar en esta ocasión la columna. Tiempo de estío, que también parece que se vuelve tiempo de hastío. Aunque para ser honestos, no son las temperaturas lo que me produce este hastío, sino más bien, las situaciones que me rodean.  El mundo al rededor del que giro. 

Es agotador y doy fe de ello, hablar cada mes de lo mismo, pero; la intolerancia crece, el egoísmo alimentado por la ignorancia, destapa lo más miserable de aquellos que vendieron sus valores a ídolos de su misma calaña. La radicalización de la población, va en aumento... Ahí tenemos los resultados de las elecciones europeas, y el más que probable en las próximas legislativas francesas. 

La Liberté, Fraternité e Egalité, que han sido nuestro referente europeo de la libertad y la justicia social, “ils von au le merde”.

 Aujourd´hui el fascismo vuelve a tomar relevancia, aupado por esos ignorantes desencantados, que en vez de luchar por todo lo conseguido, prefieren ofrecer sus heridas a manipuladores totalitarios, que, en vez de curarlas, se van a alimentar de ellas, infectándolas de odio. Y como un mal virus (que lo es) se va extendiendo por toda Europa.

Italia, Hungría, Suecia, Alemania, Bélgica, Portugal y como si se tratara de un efecto dominó seremos los siguientes.

Algo incomprensible por otro lado, si tenemos en cuenta que el progresismo también aumenta, aunque sea tímidamente y condicionado por quienes son sus artífices. Que, en nuestro caso particular, siempre están “a la gresca” por ver quien se cuelga la medalla o saca redito de ello.

Siempre dije que la izquierda nunca fue perfecta, pero de ahí a ofrecer la yugular, a unos fascistas ávidos de sangre, se ve una falta total de unidad, de estrategia política y de la consecución del bienestar común.

En fin, yo sigo con mis ilusiones y mis utopías, cuando debería decir esa frase que tanto odio, por su exasperante conformismo, que dice:  Esto es lo que hay.

Cómo me gustaría escribir cada mes sobre los logros sociales conseguidos, sobre las reivindicaciones conseguidas, sobre la paz social reinante. Sobre un Estado del bienestar blindado ante las injerencias de los poderes fácticos.

Escribir, al fin y al cabo, sobre asuntos positivos.

Que lo más relevante fuera, algún logro médico relevante, que las estadísticas, reflejaran al progresismo y el bienestar social, como una tendencia en auge en nuestro país y en toda Europa. 

O qué sé yo… Que, a Pepito, en su quinto cumpleaños le han regalado su primera bici, han ido todos sus amiguitos, han comido tarta y se lo han pasado muy bien, o la perrita de la vecina ha tenido unos cachorritos preciosos.

Pero las noticias amables, sean de la índole que sean, no son noticia.

Bueno tenemos dos casos recientes que alumbran un poco el panorama.

Por fin se ha pactado la renovación del CGPJ. Después de cinco años.

Aplaudir no voy a aplaudir, porque ya está bien, que se renueve. Aunque si entramos en matices, no parece que se haya conseguido sin alguna concesión. El actual vocal del CGPJ, José María Macías Castaño, (conservador de la línea dura, firme opositor a los proyectos de ley progresistas y en permanente hostilidad con el Gobierno) pasa a ocupar la plaza vacante, como magistrado del Tribunal Constitucional (TC)

Nada es gratis, así que lo dicho: Aplausos, los justos.

Y en el plano internacional, tenemos la liberación de Julián Assange, creador de Wikileaks, acusado de filtrar documentos militares sobre los desmanes Yankees en Irak y Afganistán, así como información sobre torturas en Guantánamo, y violaciones sistemáticas de los derechos humanos. 

Acusado oficialmente de obtener información sobre la defensa nacional, y con ello poner vidas en peligro. (No serían las de las víctimas de estas violaciones, supongo) De lo que no hay que pensar mucho para deducir, que, al periodismo de investigación, los “yueseis” lo llaman traición cuando no les conviene. Y que la primera enmienda de la Constitución USA, que protege la libertad de prensa, se la han pasado por debajo de la túnica de la estatua de la Libertad.

Pero después de más de una década, y tras muchos intentos de negociación fallidos, ha conseguido llegar a un acuerdo, declarándose culpable del delito de espionaje, por fin ha conseguido su tan necesaria y justa libertad.

Porque como dice un refrán muy nuestro: 

No hay mal que cien años dure, ni cuerpo que lo aguante. 

¡¡Desde aquí, mi más sincera enhorabuena, Julian!!

(Se pronuncia Yúlian, no vayamos a equivocarnos con mi cuñado.)

Y hasta aquí hemos llegado. 

Aquí lo dejamos. Os deseo un espléndido verano, o al menos un espléndido mes de Julio. 

Así que como es habitual, me despido con eso de: A quien Dios se la dé, San Pedro se la bendiga, si no se han ido ya de vacaciones. 


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