El héroe prófugo, Edmundo González
El Comunero.
Octubre/24.
Seguramente si Edmundo González en lugar de ser un opositor a Maduro fuese un fiel aliado del presidente venezolano, seguramente serían muchos los que estarían levantando su voz en estos momentos, no para definirlo como "héroe" sino para pedir su arresto acusado de crímenes contra la humanidad
Comienza a ser una fea costumbre que nuestro país acoja a los opositores venezolanos que incapaces de derrotar a Maduro en las urnas (por algo será) terminan, después de pedir a Estados Unidos que invada el país, pidiendo asilo en nuestro país, donde más viven a cuerpo de Guaidó, con paguita (considerable) y casa (esto sí) que sufragan a escote todos los españoles.
El último de estos "inmigrantes" de paguita y casa de lujo no es un moreno llegado en patera, como asegura el bulerio patrio, sino un tipo blanco y millonario que ha huido de la justicia de su país que, pensando que el llamamiento a la sublevación popular que hizo tras conocer que había perdido las elecciones era un delito, estaba redactando una orden de detención contra él, que, avisado por algún correligionario infiltrado en las fuerzas de seguridad bolivarianas, no tardo ni cinco minutos en personarse en la puerta de la embajada española en caracas, para solicitar el ya caso habitual asilo en nuestro país, que, por supuesto se lo ha concedido.
El caso de Edmundo González, es muy particular porque es un hombre estrechamente vinculado a la guerra sucia que ensangrentó Latinoamérica en los años de plomo de Ronal Reagan, un tipo que participó y colaboró estrechamente, como poco, con la creación de guerrillas anticomunistas y escuadrones de la muerte como el que en el año 1989 acabó en el Salvador con la vida del teólogo y filósofo religioso español, Ignacio Ellacuría, el salvador era el país en el que Edmundo González trabaja para la CIA desde su puesto de funcionario de la embajada venezolana en San Salvador. Sin embargo, a pesar de su implicación con todo tipo de actividades subversivas y criminales, la imagen que de González se da en Europa y Estados Unidos es la de un hombre centrado y demócrata. Seguramente si Edmundo González en lugar de ser un opositor a Maduro fuese un fiel aliado del presidente venezolano, seguramente serían muchos los que estarían levantando su voz en estos momentos, no para definirlo como "héroe" sino para pedir su arresto acusado de crímenes contra la humanidad.
Un Edmundo González que, incluso antes de conocerse los resultados oficiales, ya se autoproclamaba presidente de Venezuela tras las elecciones presidenciales celebradas el pasado mes de julio en el país con las mayores reservas petroleras del mundo. Pero un Edmundo González, que después de anunciarse por el organismo oficial la victoria en los comicios del actual presidente, Nicolás Maduro, no tardó en llamar a la sublevación ciudadana, causando una serie de incidentes en todo el país que ocasionaron un, aún, indeterminado número de muertos en enfrentamientos con las fuerzas de orden público bolivarianas, al tiempo que Corina Machado, la otra candidata fascista y aliada de González, reclamaba directamente a los Estados Unidos que bombardease Caracas.
A tenor de lo que sabemos no parece muy acertada la decisión de la Unión Europea de respaldar como presidente de Venezuela a Edmundo González, un hombre con más sobras que luces y problemas con la justicia desde antiguo, problemas que también afectan a su hija, Érika Carolina González, que está acusada por la Fiscalía de estar vinculada a distinto casos de corrupción.
Añadir comentario
Comentarios