Me vas a perdonar, Euclides...
Gregorio Duque.
Septiembre/23
Euclides no supo del cambio climático ni de la transición ecológica ni de la asquerosa burocracia en la que cualquier Administración dispone de concejalía, consejería insular, consejería autonómica o ministerio con competencias en materia preventiva en esas materias, pero lo que se ejecutan una y otra vez son las reactivas, consecuencia de la dejadez.
Euclides fue un matemático griego (325 a.C.-ca.265 a.C.), al que se le conoce por ser el padre de la geometría". Desarrolló su trabajo en Alejandría (antiguo Egipto) en tiempos de Ptolomeo I (323– 283 a.C.), y fundó la escuela de matemáticas de la ciudad.
Su obra más famosa fue una compilación expositiva, sistemática y demostrada en trece libros de los conocimientos matemáticos existentes en su época denominada Elementos, considerada a menudo como el manual, tratado o libro de texto de más éxito en la historia de las matemáticas, en los que se deducen racionalmente las propiedades de los objetos geométricos y de los números naturales, a partir de solo un pequeño conjunto de axiomas. Autor de la universalmente conocida máxima de que “el orden de los factores no altera el producto”, a Euclides pues debemos señalar como el culpable de que en la carne con papas haya más papas que carne, que da lo mismo incorporar la noticia a la página uno del diario, o que el comienzo de un informativo pueda tener idéntico valor que el previo al minuto publicitario y anterior a la previsión meteorológica.
Y así, mientras siguen los bombardeos a objetivos civiles en un territorio ocupado por Rusia y los países aliados siguen sin formar a pilotos ucranianos en el manejo de F-16, la noticia de cabecera ha sido el que nos vistamos y decoremos los establecimientos comerciales del planeta de rosa,
lo que no se ha solicitado ni siquiera el día mundial del cáncer de mama, para apoyar con ello la
difusión de la obra cinematográfica tan proporcionalmente cultural comode denuncia social titulada “Barbie”, dejando ya para Parta las plataformas mediáticas, en función de su línea editorial, el minutaje relativo a la asistencia de los miembros de la Casa Real, del número de asistentes por semana, o si alguno salió más listo de como entró a la sala.
No altera el producto el orden, decía Euclides. Pero Euclides no supo del cambio climático ni de la transición ecológica ni de la asquerosa burocracia en la que cualquier Administración dispone de concejalía, consejería insular, consejería autonómica o ministerio con competencias en materia preventiva en esas materias, pero lo que se ejecutan una y otra vez son las reactivas, consecuencia de la dejadez.
Es el caso del último incendio forestal a afectó a la isla de Tenerife, en el que pese a que más de 5.000 profesionales de Canarias de las ramas de la ingeniería forestal, la ingeniería agrícola, veterinaria, la agricultura y la ganadería, advierten en un manifiesto de que el archipiélago "es un polvorín" expuesto a megaincendios forestales que pueden desencadenarse simultáneamente en varias islas por lo que entiende que "lo peor está por llegar", se sigue optando por ejecutar un circuito del motor por 60 millones de euros al tiempo que no se implanta un programa de sensores de temperaturas, por coste de menos de la décima parte.
Habrá que recordar, para aquellos que desconozcan la realidad canaria, que el orden de los factores puede verse muy alterado, pese a Euclides, dado que si no hay base permanente de hidroaviones en Canarias, que para que intervenga el Estado hay que ir pasando de nivel 1 a nivel 3, que los incendios normalmente surgen de noche y que los hidroaviones tardan más de un día en incorporarse a la extinción, cuando los factores de extinción de incendios estén plenamente operativos, el producto bosque está en manos de un fuego descontrolado de miles de hectáreas, a los que hay que añadir, al parecer, nuevos factores como el viento y calor en verano, y que las montañas y barrancos hayan ganado en altura y dificultad para justificar la ineficacia, dado que esos mismos argumentos no se han utilizado para justificar una base permanente que no tiene una región con tres de cuatro parques nacionales arbóreos y con islas con porcentajes en espacios naturales similares a Canadá.
Y, le pese lo que le pese a Euclides, pesa más el pico, celebrado por la totalidad de las jugadoras de la selección, víctima incluida, riendo y pidiendo otro, que la agarrada de pernera a tres metros de la reina de España, quedando todo en agresión sexual, y olvidándonos de que si la agresión sexual, según el nuevo artículo 178.1 del Código Penal tiene como bien jurídico protegido la libertad sexual, y que existirá consentimiento cuando se manifieste libremente a través de actos que expresen de manera clara la voluntad de la persona, y no existiendo violencia, intimidación, abuso o inferioridad, le pese a la FIFA, a la ONU o al Papa de Roma, el cese del calvo casposo debería haberse producido por conducta impropia, y no por comisión de un delito en el que horas después, era motivo de bufa en el viaje de vuelta por todas las componentes de la selección, incluida Jenny, sin que sepamos si ha podido entrar algún otro factor que motivara el cambio de consideración de ésta de “anécdota” a delito.
Y, perdone, D. Euclides, pero ni de coña es lo mismo morir en una discusión en el cuarto de baño, que morir degollado en el cuarto de baño y descuartizado con utensilios comprados previamente en la ferretería más cercana al nidito de amor. Una enorme preocupación ha crecido en los hogares españoles y colombianos, discutiéndose al parecer si el cargarse al novio y desmembrarlo con los serruchos guardados en el armario desde el día antes, es premeditación, lo cual conlleva en países no desarrollados como Tailandia la pena de muerte o si, por el contrario, es homicidio imprudente, o enajenación transitoria, quedando para la última parte del informativo, tras la conexión con los enviados especiales para enseñarnos el tipo de maleta en la que este asesino confeso que lo único que comparte con nosotros es su nacionalidad y habla llamado Daniel Sancho , sin que supiéramos hasta hace un par de días por dónde se mueven algunos de los violadores dejados en libertad por la ley del Sí es Sí, caso de Manuel R.C, de 58 años, que en abril de este año, tras beneficiarse de una rebaja de condena por violar y dejar tuerta a una mujer, intentó agredir sexualmente a una mujer en dos Hermanas, a la que intentó violar golpeándola con un palo, aunque ya puestos a hablar de idénticos delitos, con la de Rubiales ya va colmado el informativo.
Y, finalmente, quizás Euclides no tuvo necesidad de azotar a esclavos para que hicieran los trabajos domésticos, ni hubo nadie que le tosiera en sus argumentaciones, pero puestos a llegar a la conclusión de la manipulación mediática que estamos padeciendo desde hace años, no es lo mismo que te lo diga mil veces Federico, a que te lo diga Noam.
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