Borbonadas

Recuérdese que este enfant terrible para lo negativo, es en línea sucesoria el llamado a ser “Dios no lo consienta” futuro rey de España, salvo amaños constitucionales y otras hierbas, con los que pretenden sea su prima Leonor la que ostente ese rango de mamandurria sin oficio ni beneficio, salvo que una República a tiempo lo resuelva de modo democrático y en favor de las libertades y el pueblo que siempre paga.

Así, Felipe Juan Froilán de Marichalar y Brbón fiel seguidor de sus antepasados Borbones, acostumbra a liarla parda por los sitios que pasa, con la impunidad de sus antecesores y la misma falta de vergüenza que otorgan los privilegios reales. “¿Tú no sabes quién soy yo, puto chino?” en una fila en la que alguien que llevaba mucho tiempo le impedía colarse, “¿Tú no sabes quién soy madero?” en la última reyerta en la que le detuvieron con un cuchillo de grandes dimensiones, son solo algunos de los episodios de prepotencia y vandalismo de la criaturita.

En fin, que lo llamativo no es lo que haga un Borbón, que bien sabemos cómo se las han gastado a lo largo de la historia, lo verdaderamente llamado a la reflexión resulta de que bien entrado ya el siglo XXI, esta familia siga teniendo patente de corso para hacer de su capa un sayo, y uno de ellos, Felipe, sea ahora la piedra angular que soporta el entramado de todo el tardofranquismo , y que bajo su paraguas se proteja el capitalismo más montaraz, el que tuvo en su tiempo el disfraz del pelotazo, y ahora va de romper España y de si los pobres ya no me sirven los sustituyo por otros que sí lo hagan. Son los de “esto es el mercado amigo” que decía el delincuente Rodrigo Rato, la banderita con el aguilucho en el reloj, pero la pasta en Suiza y libre de impuestos.